Mi visión
la música es un lenguaje que debe conmover, promover la cultura y, finalmente, transformar la sociedad.

Creo que la música es un lenguaje que debe conmover, promover la cultura y, finalmente, transformar la sociedad.
Busco hacerlo con el “Tantris Ensemble”, una agrupación musical de la que soy director y co-creador y con la Orquesta Sinfónica MDC. Con los primeros fue con quienes debuté como director, en la inauguración de la 25 temporada de Matinées de la OSE en un concierto de serenatas de cuerda.
El hecho de ser violinista profesional es, en mi caso, una ayuda inestimable. Nací en Toledo, pero mis inicios musicales fueron en Alcalá de Henares. Desde allí, y en el Conservatorio Superior de Madrid, con Santiago de la Riva, hasta mi posgrado en Amsterdam, creo haber adquirido una visión muy amplia de los diferentes formatos y estilos musicales.
Gracias al violín no solo me apasiona la música clásica en cualquiera de sus formas, sino me fascinan asimismo terrenos tan distantes de ella como el jazz o el flamenco.
El violín contribuye a mi condición de director de orquesta con dos enormes aportaciones. La primera de ellas es la experiencia que como intérprete he acumulado, ya sea actuando como solista o concertino. La segunda, como músico de orquesta, me ha permitido participar en muy variadas formaciones en España, Europa y América, así como trabajar con numerosos directores de prestigio.
